Sevilla, 10 al 12 de septiembre del 2009
Buenos días Delegadas y Delegados del 9º Congreso Regional de Andalucía:
Quiero Agradecer la atención que voy a recibir en los 10 minutos que me han sido concedidos, para compartir la lucha que hemos llevado a cabo las mujeres y los hombres para dignificar la vida de la clase obrera, desde que Flora Tristán en la década de 1830 recorriera innumerables fábricas, reuniéndose con los obreros de forma clandestina para hacerles ver que estaban siendo explotados, y que para salir de la explotación debían organizarse, creando la Unión Obrera Internacional, que acabaría con la diferencia de clases y asumiría a las mujeres como iguales.
Quiero agradecer a: UGT de Andalucía, a su Secretario Regional Manuel Pastrana, y a la Secretaria de las mujeres Lola Gavilán, la oportunidad que se me brinda hoy de representar a la Plataforma Andaluza de Apoyo al Lobby Europeo de Mujeres; que es una organización feminista con 24 organizaciones miembras en Andalucía.
Nuestra lucha como feministas no es otra que defender los derechos de las mujeres y los de los excluidos de la tierra.
Bien, pues desde este posicionamiento tenemos que valorar los avances producidos en este país en los últimos 30 años para la ciudadanía en general, y para las mujeres en particular, si recordamos que hasta entonces las mujeres:
• No podíamos ser titulares de ctas. bancarias
• Estábamos excluidas del mercado laboral
• Los anticonceptivos no existían…y así hasta un largo etc.
Compañeras y compañeros, hoy, las mujeres tenemos presencia en los parlamentos, somos el 57% de licenciadas en las universidades, podemos ser juezas, médicas, arquitectas, y hemos conseguido Leyes de Igualdad y Contra la Violencia hacia Nosotras las Mujeres en Andalucía y en el Estado Español, así como la inclusión de 17 artículos en el Estatuto Andaluz, que defiende la igualdad entre mujeres y hombres.
Sin embargo compañeras y compañeros, en este país, no se organizan manifestaciones multitudinarias por las centenas de mujeres que han sido asesinadas en los últimos 10 años, porque como bien sabemos hasta ahora estos crímenes y la violencia contra las mujeres no se visibilizaban. Como tampoco se organizan mencionadas manifestaciones cuando los obreros mueren en el tajo.
A pesar del esfuerzo sindical conocemos que los contratos a tiempo parcial, temporal y la economía sumergida, tienen nombre de mujeres, como sindicalistas conocemos que las mujeres perciben el 25% menos de salario que sus compañeros con la misma categoría profesional. También conocemos que estamos excluidas en profesiones que están totalmente masculinizadas y se nos sigue manteniendo en profesiones feminizadas. Habría que hacer el esfuerzo de que todas las profesiones quedasen recogidas en el estatuto de las trabajadoras y los trabajadores, en el cual tenemos pendiente de incluir a las trabajadoras del hogar.
Hemos conseguido el permiso de paternidad, aunque son sólo un 2% de los hombres que lo solicitan. Bien conoce la UGT que éste es uno de los motivos por los que el empresariado realiza despidos improcedentes, y bien conocemos las mujeres, el resultado de una entrevista de trabajo cuando se nos pregunta el estado civil, si tenemos hijas o hijos, cuestiones claramente sexistas y antidemocráticas.
Compañeras, como dice José Antonio Griñan: un país que pretende avanzar económicamente, no se puede permitir desaprovechar más del 50% de su potencial humano que somos las mujeres. Por lo tanto, convencida estoy de que la UGT–Andalucía en la nueva etapa que comienza al finalizar este congreso, va a priorizar la presencia de las mujeres en:
• Los puestos de responsabilidad
• En los convenios colectivos
• En las secciones sindicales
• En los comités de empresaria, y en las distintas ejecutivas. Haciendo efectiva y dando cumplimiento a la ley de igualdad en el sindicato y en la empresa.
Por ello, nosotras las mujeres tenemos que incrementar la afiliación de más mujeres y manifestar, igual que lo manifiestan los varones, nuestra capacidad de liderazgo.
Los derechos que hoy tenemos las mujeres se los debemos a mujeres sindicalistas y feministas como:
• Flora Tristán
• Rosa de Luxemburgo
• Alejandra Kolantai
• Dolores Ibarruri
• Victoria Kent o Clara Campoamor
Con lo expresado hasta aquí, porque quiero ser respetuosa con el tiempo concedido, permitidme compartir que tenemos que reflexionar y posicionarnos para la consecución de una sociedad en valores de justicia e igualdad, tenemos que retomar la lucha de clase, no podemos permitir que se legalice la prostitución, que es la violencia contra las mujeres en su máxima expresión.
Compañeras y compañeros, tenemos que dar respuesta a las mujeres y hombres que en este país (con y sin crisis) se ven obligadas y obligados a vender su tiempo con jornadas de más de ocho horas, por salarios que no les permite tener una vida digna.
No debemos olvidar que Pablo Iglesias en 1890 encabezó la primera manifestación del 1º de mayo en España, en la que se exigía la jornada laboral de 8 horas y el cese del empleo de niñas y niños.
Y por último, las trabajadoras y los trabajadores del siglo XXI debemos dejar de vivir en este falso aburguesamiento que nos tiene adormecidas y adormecidos, y volver a retomar las calles, las fabricas, los despachos para dejar a nuestras hijas e hijos el mundo que se merecen.