Nuestra primera revista, dedicada a la igualdad salarial entre mujeres y hombres, vio la luz a raíz del informe que nos remitió Elena Valenciano, por aquel entonces Eurodiputada. De dicho informe se desprende que las mujeres, aun teniendo la misma categoría profesional, hemos de trabajar un mes y veintidós días más al año que los hombres, para equiparar nuestros salarios a los de ellos.
Por otro lado, somos conscientes de la existencia de los contratos a tiempo parcial, temporales, y, obviamente, de la economía sumergida, de la feminización en profesiones como empleadas de hogar que, como es sabido, aún no están incluidas en el estatuto de las trabajadoras y los trabajadores. Asimismo, hay ausencia de mujeres en altos cargos directivos en empresas públicas y privadas. También existe desigualdad de prestaciones por jubilación entre mujeres y hombres y, consecuentemente, desigualdad en dichas prestaciones a viudas y viudos. Bien, pues todas estas circunstancias han hecho posible la expresión Feminización de la Pobreza, que no es otra cosa que la expresión de que las mujeres somos el sur de todos los nortes, como bien ha puntualizado, Carmen Sarmiento.
Convencidas que desde el feminismo tenemos que llegar a la raíz de las desigualdades para poder construir una sociedad, donde mujeres y hombres seamos equivalentes, hemos solicitado al Parlamento Europeo y Andaluz, así como al Ministerio de Igualdad, que se instaure el 22 de Febrero como Día Europeo por la Igualdad Salarial entre Mujeres y Hombres. La presente edición redunda en la necesidad de que así sea.
Gracias, especialmente, al trabajo que el Consejero de Economía de la Junta de Andalucía ha llevado a cabo en esta comunidad se ha demostrado que desde el patriarcado se está menospreciando la profesionalidad,
los saberes y la experiencia del 52,07 % de la población mundial que somos las mujeres. Como consecuencia de ello, sin duda, la economía se está viendo mermada.
Quisiera, asimismo, dar las gracias a la Ministra de Igualdad y a todas y a cada una de las mujeres que escriben en esta revista, desde la que queremos transmitir la imperiosa necesidad de que los salarios de las mujeres sean dignos, pues ello dignificará también nuestras vidas.
Ya decía Virginia Woolf, a mediados del siglo XX, que las mujeres necesitábamos 500 libras al año para conseguir nuestra independencia, que había sido tutelada , primero, por la figura paterna, y más tarde, por la marital. Estamos convencidas de que nosotras las mujeres – siguiendo a Simone de Beauvoir- necesitamos las herramientas básicas que nos permitan ser libres, para poder así ser dueñas de nuestros cuerpos, y tomar nuestras propias decisiones. Por ello, desde esta Plataforma Andaluza de Apoyo al Lobby Europeo de Mujeres seguiremos luchando para conseguir una sociedad de justicia para todas las humanas y los humanos.
Continuaremos con nuestro esfuerzo por lograr la igualdad salarial, y de la misma forma que se propiciaron los derechos de nosotras las mujeres, a partir de la conmemoración del 8 de Marzo, deseamos también conseguir que sea el día el 22 de Febrero, la fecha que marque el día Europeo por la Igualdad Salarial entre Mujeres y Hombres.